Desde el año 2014, el conflicto activo en la región del Donbás (este de Ucrania) ha tenido consecuencias humanitarias severas para la vida de las personas y su bienestar, sus hogares y para infraestructura esencial. Con violaciones continuas de los altos al fuego acordados, la población se enfrenta a la interrupción del acceso a asistencia sanitaria, alimentos, agua segura, calefacción y electricidad, y también a servicios de educación y sociales y a oportunidades de medios de vida.
En los últimos días se han intensificado los enfrentamientos en la región, crece la incertidumbre ante la posibilidad de una escalada mayor del conflicto, y han comenzado movimientos de población desde las localidades más afectadas a distintas regiones de Ucrania, Rusia y a otros países vecinos como Polonia.
Cruz Roja Española ha lanzado un llamamiento en el marco de la respuesta del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.
